domingo, 1 de abril de 2007

Al mal tiempo buena cara


Cada vez que llueve y hay tormenta es común escuchar que ha "empeorado" el tiempo, que el tiempo está malo, que se espera que en algún momento mejore y otras frases por el estilo.
Según afirman algunos psicólogos, es probable que esta visión pesimista de dichas condiciones climatológicas obedezca al temor ancestral que despiertan los elementos, lo cual íntimamente nos da la pauta de nuestra pequeñez e indefensión ante la naturaleza.
Sin embargo, soy de la opinión que la identificación de mal tiempo con lluvias y tormentas no deja de ser un convencionalismo que para nada constituye una regla general, aceptada por todos.
Sin ir mas lejos, mi propio caso (y considero que debe haber unos cuantos que coincidan conmigo). Voy a ser franco en afirmar que prefiero las lluvias y las tormentas al sol que raja la tierra, el calor sofocante y otras penurias por el estilo. De donde las condiciones climáticas que generalmente son definidas como "malas", para mí son "buenas".
Disfruto de la lluvia y las tormentas. Ese es un estado del tiempo que genera las condiciones propicias para quedarme en mi casa tranquilo, leyendo un libro, trabajando con la compu, mirando una película, haciendo "algo" con la patrona, jugando con la nena, escuchando música, organizando comidas con los amigos y otros menesteres. En mi caso es una condición que me permite pensar en forma más tranquila y reposada, hacer balances, sumergirme en la nostalgia recordando cosas pasadas y miles de otras experiencias que de pronto no me son tan propicias con "buen" tiempo.
Por lo contrario, los días de sol y calor traen aparejadas otras exigencias que no se compadecen demasiado con mi forma de ser. Ahí tenemos que cazar los cacharros y salir a disfrutar en forma comulsiva del aire libre junto a las multitudes que gozan de los mismos beneficios climáticos. Se reduce el tiempo para uno mismo. Tenemos que marchar junto al rebaño y dejar para más tarde las ocupaciones que aguardan en n uestros hogares.
No, decididamente, lluvias y tormentas son "buen" tiempo.
En estos momentos tan dramáticos que viven algunos hermanos nuestros, debo dejar aclarado que cuando me refiero al comentario anterior lo hago en forma genérica y abstracta, sin referirme a catástrofes y desgracias, que tanto vienen de la mano de inundaciones como de sequías extremas.

1 comentario:

Fabiana Bump dijo...

Imaginate en la ead de piedra estar encerrado en una caverna 15 días por lluvias y tormentas.